Cebada editada con CRISPR comenzará pruebas de campo en Suiza
Estas líneas desarrollaron más granos por espiga en el invernadero.
La cebada editada con CRISPR empezará a ser sembrada en pruebas de campo por la estación de investigación suiza Agroscope, quien ha obtenido la aprobación de la Oficina Federal de Medio Ambiente de Suiza.
La atención se centra en un gen de la cebada que ha sido desactivado por nuevas técnicas de edición de genes. La prueba, que se iniciará en la primavera de 2024 en Zurich-Reckenholz y durará tres años, tiene como objetivo determinar si de esta manera se pueden aumentar los rendimientos.
Los científicos identificaron que el gen CKX2 participa en la regulación de la formación de semillas, y que al desactivarlo mediante CRISPR-Cas9 se producen mayores rendimientos en arroz y colza, por lo que ahora el turno es de la cebada, buscando unir este cultivo a la lista de cereales mejorados con edición genética.
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Investigadores de la Freie Universität Berlin han observado que la cebada posee dos copias ligeramente diferentes del gen CKX2.
En asociación con científicos del Instituto Leibniz de Genética Vegetal e Investigación de Plantas de Cultivo (IPK), produjeron líneas de cebada en las que ambas copias estaban desactivadas. Estas líneas desarrollaron más granos por espiga en el invernadero.
Junto con la Freie Universität Berlin, Agroscope está investigando estas plantas de cebada editada con CRISPR para definir si esta variedad producirá más granos por espiga y a su vez aumentará el rendimiento. También quieren saber si es necesario desactivar ambas copias del gen CKX2 y si la desactivación de una o ambas modifica otras características además del rendimiento en campo.
La prueba de campo comenzará en la primavera de 2024 en Zurich-Reckenholz y durará unos tres años. Por motivos prácticos, se está investigando con la antigua variedad de cebada cervecera Golden Promise, que no se cultiva en Suiza. Esta variedad es comparativamente fácil de modificar genéticamente y, por lo tanto, se utiliza a menudo en la investigación.
Sin embargo, los conocimientos adquiridos en los ensayos también serán aplicables a variedades modernas de cebada y, con buenas perspectivas de éxito, a otras especies de cereales como el trigo o la espelta.
La formación del rendimiento de los cultivos es compleja e involucra muchos genes diferentes. Sin embargo, investigadores japoneses han descubierto que la mutación del gen CKX2 en el arroz tiene un efecto inesperadamente significativo sobre el rendimiento.
Los resultados de la investigación muestran que los genes correspondientes al gen CKX2 del arroz también desempeñan un papel, por ejemplo, en el rendimiento de la colza. Por tanto, es razonable estudiar este efecto en otros cultivos. En el mejor de los casos, al final de estos ensayos será posible emitir una recomendación sobre si se debería desactivar uno o ambos genes CKX2 para aumentar los rendimientos.
Lo que es seguro, sin embargo, es que se proporcionará información importante sobre la función de los genes CKX2 en la cebada y, por lo tanto, estarán disponibles hallazgos científicos relevantes para una mejor comprensión del rendimiento en otros cereales.
Esta es una de las múltiples formas en que la edición genética con CRISPR aporta a la agricultura sostenible y a la seguridad alimentaria.